Tienes una deuda y la quieres reestructurar. Aquí te contamos las desventajas de hacerlo; hay riesgos y costos que debes contemplar. Infórmate y toma la mejor decisión.
Reestructuración de deuda: ¿qué es y cómo funciona?
La reestructuración de una deuda es una negociación que se realiza con la institución financiera que te otorgó el crédito tras tener atrasos en el pago de las mensualidades o, incluso, caer en impago.
Consiste en analizar el estatus de los pagos, cómo y cuánto se debe.
Teniendo este panorama, se busca ajustar los términos en los que se contrató inicialmente el crédito para que puedas conseguir nuevas condiciones de pago, por ejemplo, tener ahora una mensualidad más baja y/o un nuevo plazo de pagos.
De esta forma, estas cambiando los términos de esta obligación financiera.
Razones comunes para considerar la reestructuración
La reestructuración de una deuda toca la mente de las personas cuando se presentan una serie de situaciones que complican el poder cumplir con las obligaciones financieras en curso.
A continuación, te compartimos las más comunes.
- Imprevistos: situaciones como enfermedades, pérdida de empleo o quiebra, en el caso de tener una empresa.
- Disminución de los ingresos: gastos inesperados, una reducción en los ingresos por bajas ventas o cambio de empleo.
- Sobreendeudamiento: tomar más compromisos financieros de los que se pueden atender.
Antes de contraer un compromiso financiero, es importante que analices tu capacidad de pago e identificar posibles riesgos o imprevistos además de ver cómo puedes hacerles frente en caso de ser necesario sin afectar tu desempeño crediticio y tu calidad de vida.
Desventajas de la reestructuración de deuda
Aunque la reestructuración de deuda personal puede ser una herramienta útil, también presenta desventajas.
En primer lugar, puede afectar negativamente tu calificación crediticia en el buró de crédito.
Esto puede dificultar la obtención de futuros financiamientos.
Además, algunos acuerdos de reestructuración pueden implicar costos adicionales o cargos extras, lo que aumenta la carga financiera a corto plazo.
Es importante tener consciencia que la reestructuración no garantiza la eliminación completa de la deuda y puede resultar en pagos totales más altos a lo largo del tiempo debido a la extensión de los plazos o a intereses acumulados.
También existe la posibilidad de que no todos los acreedores acepten los términos propuestos, lo que complica la implementación del plan.
Por último, la reestructuración de una deuda podría limitar las opciones financieras futuras y requerir un compromiso prolongado para restaurar la estabilidad económica.
Alternativas a la reestructuración
Existen varias alternativas a la reestructuración de deuda personal que pueden considerarse antes de tomar esa medida.
En primer lugar, la renegociación directa con los acreedores puede ser una opción, buscando acuerdos temporales o planes de pago más flexibles.
La consolidación de deudas es otra alternativa, donde se combina toda la deuda en un sólo préstamo con términos más favorables.
También puedes explorar programas de asesoramiento crediticio que te pueden proporcionar estrategias para gestionar la deuda sin reestructuración formal.
La refinanciación, especialmente si hay tasas de interés más bajas disponibles, podría reducir la carga financiera.
Además, desarrollar un presupuesto ajustado y explorar fuentes adicionales de ingresos puede ayudar a mejorar la situación financiera sin recurrir a la reestructuración.
Cada alternativa debe evaluarse cuidadosamente según la situación individual para tomar decisiones informadas y evitar posibles impactos negativos a largo plazo.
Conclusiones
La reestructuración de una deuda por tarjeta de crédito es una opción cuando se tienen dificultades financieras, sin embargo, tiene consecuencias como incrementar los costos del financiamiento, dejar huella negativa en tu historial crediticio y cargos extras por la modificación del contrato inicial.
Antes de tomar una obligación financiera analiza tu capacidad real de pago, si tienes ahorros con qué hacer frente a tu crédito en caso de un imprevisto y con ello evites la reestructura.
Fuentes y recursos adicionales
https://revista.condusef.gob.mx/2017/05/opciones-para-liquidar-tu-deuda/